"hubo un momento en que pude creer que esta novela era mía".
Juan Carlos Onetti, en el prólogo de la primera novela de Álvaro, Todo Tiempo Pasado, 1975.
Aunque pasó más de cuarenta años en España, donde publicó tres libros entre 1975 y 1980, Álvaro siempre escribió sobre el Uruguay, donde publicó un cuarto libro en 2004, dejando a su muerte, acaecida en 2015, siete novelas inéditas, más un libro de relatos, que aquí se ofrecen por primera vez al público.
Junto a tres novelas más o menos autobiográficas, se incluyen otras tres novelas de tintes policiacos, todas de temática uruguaya, y otras tantas ambientadas en Europa, además de tres libros de relatos. Doce libros, en suma, que abarcan cuarenta años de la producción literaria, desde la juventud hasta la madurez, de un escritor con todas las letras, que tuvo una vida azarosa y complicada, propia de los escritores malditos de antaño, y que merece mayor reconocimiento, aunque sea a título póstumo.
Hubo un momento en que pude creer que esta novela era mía. En cierto modo tortuoso, yo era el autor.
El libro creció junto con la adolescencia de Álvaro Castillo. Allá, por sus dieciocho años, se trataba del borrador de un cuento, de una muerte y un abuelo. La inteligencia literaria tiene la debilidad de ser inocultable. Álvaro me traía nuevas versiones con mucha fe en el no nacido libro y en mi opinión. Implacable, yo comentaba e incitaba. A los seis meses, más o menos, Álvaro Castillo insistía con otra visión de la muerte de su abuelo. Haciendo memoria, en aquellas tentativas mató dieciséis veces al viejo señor. Aunque no creo que lo haya logrado nunca.
Álvaro Castillo se vino a España y gocé de un par de años, libre de fantasma.
Pero también yo vine, estoy, y el abuelo, tan viejo amigo de la muerte, me estaba esperando, tan puntual como su frecuentada amiga. Sin embargo, ya no se trataba del ansioso boceto de cuento, sino de una novela madura, asombrosamente bien escrita y construida. Éste es el libro que me atrevo a prologar, llamando la atención de los miopes.
Juan Carlos Onetti
Madrid, mayo de 1975.
OBRAS COMPLETAS DE ALVARO CASTILLO
Cinco años después de la muerte de Álvaro Castillo, presentamos al público sus obras completas, que, además de los pocos libros que publicó en vida (un par de novelas y dos libros de cuentos), incluye otros ocho trabajos (siete novelas y un libro de cuentos), totalizando una docena de obras que lo convierten en el gran desconocido por conocer de la literatura latinoamericana contemporánea.
novelas uruguayas
Nadie lloró al comisario
372 páginas previamente inédita
Novela negra en la que el periodista Deluc investiga el asesinato de un comisario, supuesta víctima de los Tupamaros. Ambientada en Montevideo en 1971. Inacabada.
Deluc, intuitivo y avispado periodista de origen francés que trabajaba para el rotativo montevideano El Matinal, investiga el asesinato del comisario Pérez Moles, al tiempo que ayuda a la encantadora Josefina Lalandra a salir del lío en que se ha metido por sus relaciones con el hijo del comisario asesinado.
Nadie lloró al comisario describe con excepcional vigor y realismo la volatil situación social y política de Montevideo a principios de los años 70, cuando estaba en su máximo apogeo la encarnizada lucha entre los tupamaros y la policía, que desembocaría poco después en la dictadura militar. A pesar de estar inacabada (el final se resume en un plan esquemático), es la más extensa y quizás la mejor novela de Álvaro.
palos de ciego
225 páginas previamente inédita
Novela negra narrada en primera persona por Bernardo Bernabé Bermúdez, o Doblebe, detective. Ambientada en Nacimiento hacia 1970.
Bernardo Bernabé Bermúdez (o Doblebé), miembro de una familia patricia venida a menos, trabaja, para disgusto de su madre, viuda, en una agencia de detectives. Gracias a sus contactos, Doblebé se mueve con soltura entre la alta sociedad de la república, investigando, por encargo, un turbio asunto en el que está involucrado el hermano menor de un importante terrateniente y empresario.
A lo largo de siete días, cada vez más intensos y frenéticos, dando al principio palos de ciego, Doblebé se sumerge en un mundo sórdido y decadente, lleno de personajes retorcidos y despiadados, para desentrañar un caso en el que no faltan los tiroteos, las persecuciones, el chantaje, el asesinato y los demás ingredientes indispensables en la novela negra.
todo queda en familia
129 páginas Publicada en 2019
Novela de misterio narrada en primera persona por Antolín Cortijolar. Ambientada en Montevideo en 1961.
Antolín Cortijolar, ultimo miembro varón, ya cincuentón, de una familia patricia venida a menos, indaga los detalles que rodean la repentina muerte de su tía Doña Concepción, que fallece tras venir a tomar el té, como cada domingo, a la vieja casona donde Antolín reside con su hermana solterona, Laura Magdalena, y con su sobrina de trece años, Matildita. Antolín sospecha que su hermana Laura Magdalena ha envenenado a la anciana tía, echándole algo en el té, tras enterarse de que peligra la herencia que ambos esperaban recibir (con el deseo de mejorar el futuro de su joven sobrina).
Relato crepuscular y sarcástico de una sociedad montevideana de por sí gris y decadente en la etapa que precedió a la dictadura militar de los años 70 y 80
novelas autobiográficas
Todo tiempo pasado
234 páginas Publicada en 1975 por Plaza y Janés
Novela iniciática narrada en primera persona por Juan Balcarce, que repasa su infancia y juventud en Montevideo.
El narrador, Juan Balcarce, escribe sobre su familia (ilustre pero venida a menos), su infancia (descuidada y llena de sombras), sus estudios (erráticos y fugaces) y sus primeras vivencias (de todo tipo) en el Montevideo (que nunca menciona) del tercer cuarto del siglo XX.
Los distintos miembros de su ilustre familia (de locos), los paseos (por el Prado), el colegio (inglés), los boliches (de mala catadura), la vieja casona familiar (junto al arroyo Miguelete), las carreras de caballos (en Maroñas), todo el tiempo pasado se agolpa en una narración que nace de lo más profundo de los recuerdos y fluye inexorable, en ocasiones turbia y turbulenta, siempre vibrante y directa, recorriendo todos los vericuetos de una época pretérita que, quizás a nuestro parecer, como decía el poeta (Jorge Manrique), fue mejor.
el conjuro
227 páginas previamente inédita
Novela narrada en primera persona por Miguel Ángel Bardaracci. Ambientada en Nacimiento en 1968.
Miguel Ángel Bardaracci, un pituco niño bien de la vetusta alta sociedad, narra como desciende a los infiernos de la desesperación tras perder, en este orden, su empleo, el respeto de su atribulado padre y el amor de su pizpireta y formal novia, refugiándose en el alcohol y la literatura y rememorando los antecedentes, en principio de lo más triviales, pero que luego resultan de lo más sorprendentes, que lo han llevado a esta lamentable situación, en una descripción asaz crítia y sarcástica de la decadente e hipócrita alta sociedad rioplatense de una época en la que la posición social era casi lo único que contaba entre las estiradas familias de pretendida alcurnia.
Las flores que se arrancan se marchitan
178 páginas Previamente inédita
Novela narrada en primera persona por Diego Balcárcel, uruguayo que viaja a la España del tardofranquismo hacia 1973.
Diego Balcárcel toma un avión que lo lleva de Montevideo a Madrid, repasando, durante el trayecto, su vida y sus relaciones con su esposa Isabel, que está embarazada de su tercer hijo, y con su prima carnal, Marisa, a la que promete escribir todos los días.
En sus cartas, Diego anota sus impresiones sobre la España tardofranquista, en la que pretende encontrar trabajo e instalarse, haciendo traer más adelante a su esposa e hijos, que ha dejado en Uruguay.
novelas europeas
nunca hasta París
73 páginas Publicada en 1980 por Plaza y Janés
Novela iniciática protagonizada por Manolo Téllez, que viaja a Europa en 1935 junto a su madre y a su hermana.
En 1935, la señora Mayor Téllez decide emprender un largo periplo por Europa, junto a su hija mayor, Leonor, y su hijo Manolo, de veinte años, nacido después de la muerte de su esposo, un juez que se había vuelto loco y que, tras siete años encadenado a su cama, se había escapado, la había violado y había muerto alcanzado por un rayo.
Partiendo del puerto de Montevideo, en el barco los Téllez coinciden con Esther Shalom, una muchacha judía que parece interesada en Manolo, cuya experiencia con las mujeres es nula. Tras visitar primero España (justo antes de la Guerra Civil), van a París, donde Manolo adquiere ciertas experiencias. Prosiguiendo su recorrido por Italia, Suiza, Alemania y Grecia, Manolo decide casarse con Esther, una vez regresen a Montevideo.
El medallón
93 páginas Previamente inédita
Novela corta ambientada en Londres (hacia el año 2000) y protagonizada por Mr. Blanky, un gris contable que, tras 20 años de matrimonio, no soporta a su esposa ni a sus gatos.
Oliver Blanky, contable que trabaja en la City londinense, lleva veinte años casado, y, si bien su mujer no le ha dado hijos, ha acogido en su casa, a lo largo de los años, a varias docenas de gatos. Harto de esta situación, y deseoso de cambiar radicalmente su vida gris y anodina, Mr.Blanky empieza a maquinar cómo deshacerse de su insoportable esposa y de sus odiosos minimos.
Un mal día
60 páginas Previamente inédita
Novela corta ambientada en Londres (hacia el año 2000) que narra un día en la vida de un famoso escritor latinoamericano (de Liguania) llamado Antonio Díaz Jardim.
Antonio Díaz Jardim, un afamado escritor de éxito nacido en Liguania, pero radicado desde hace años en Londres, considera que un día sin escribir es un día perdido. Aquel día concreto, a pesar de sus intentos de desempeñar su labor rutinaria, el ilustre autor, casado con una joven argentina que responde al nombre de Leticia, no consigue su objetivo, por lo que al finalizar la jornada considera que ha sido un mal día.
Libros de relatos
el calor de enero
98 páginas Publicado en 1978 por Plaza y Janés
Serie de diez relatos cortos montevideanos: Toda la música del mundo, Tarde de invierno, El calor de enero, La ceremonia, La onda azul, El rey mago, Réquiem for you, Angelito, Serenata a la luz de un farol, Segundos afuera.
Los relatos (unos más breves que otros) de El calor de enero, de temática muy variada, hacen un retrato variopinto del Uruguay de mediados del siglo XX, retomando (en Tarde de invierno) los personajes de la novela Todo tiempo pasado, contando (en Toda la música del mundo) un incendio en Punta Ballena, resumiendo (en La onda azul) la vida de un famoso poeta uruguayo (alter ego de Roberto de las Carreras), hablando (en Requiem for you) de la muerte de su viejo perro Zorro o (en Segundos afuera) del final de un veterano boxeador.
lo fatal
176 páginas Publicado en 2004 por Capibara
Serie de cinco relatos largos ambientados en Nacimiento: Lo fatal, La nieve de Stalingrado, Naturaleza muerta con flor, García y En deuda con Lombroso.
Ambientados en Nacimiento (imagen especular de Montevideo), estos cinco extensos relatos se inspiran en personas y situaciones más o menos reales y narran tres sonados casos de asesinato (Lo fatal, García y En deuda con Lombroso), la historia de un soldado nazi huido a Sudamérica (La nieve de Stalingrado) y la de un pintor de renombre (Naturaleza muerta con flor).
alter egos
147 páginas Previamente inédito
Serie de cuatro relatos largos: La exigua paga, El cocodrilo albino, La vuelta, Diario de campaña del escribiente Merchán, supuestamente traducidos por Gonzalo Meirelles.
Supuestamente, cada uno de los cuatro relatos es obra de un autor diferente, como se explica en el prólogo y se insiste en el epílogo:
La exigua paga es del inglés Jonah Sterling, antiguo espía, El cocodrilo albino es de Miclosz Georgades, exiliado búlgaro que escribe en francés, y La vuelta es del narrador estadounidense Christopher R.Bembler, ganador del Premio Nobel. El cuarto relato, Diario de campaña del escribiente Merchán, es del uruguayo Gonzalo Meirelles, quien ha traducido al castellano los tres relatos anteriores.
En realidad, todos estos escritores son alter egos del verdadero autor de los relatos, Álvaro Castillo.
Biografía
Nacido en Montevideo el 13 de abril de 1948, en su juventud, e incluso en su infancia, Álvaro, hijo del profesor Guido Castillo, conoció personalmente a muchos personajes ilustres del Uruguay de entonces, como el pintor Joaquín Torres García (con cuyos juguetes de madera jugó Álvaro), la poetisa Susana Soca y los escritores Felisberto Hernández, Jorge Luis Borges, Juan Carlos Onetti o José Bergamín, entre otros.
Educado en la British School de Montevideo (de donde se jactaba de haber sido expulsado) y convertido en un voraz lector (la leyenda cuenta que se leyó entera la Encyclopaedia Britannica, 23 tomos), en la década de los 60 Álvaro (Castillo Visca) se sumergió en la sociedad montevideana (era un "nene bien" de una familia patricia venida a menos cuyo miembro más ilustre fue su bisabuelo, el célebre médico Pedro Visca), sociedad entonces muy convulsa por la acción guerrillera de los Tupamaros (cuyo líder, Raul Sendic, era un viejo conocido de la familia).
Entre finales de los años 60 y principios de los 70, Álvaro trabajó en la Agencia EFE de Montevideo, y colaboró asiduamente en publicaciones como el Semanario Marcha, para el que también escribían por entonces Mario Benedetti, Eduardo Galeano o Alfredo Zitarrosa.
En 1973, gracias a una beca del Instituto de Cultura Hispánica, dirigido entonces por Juan Ignacio Tena, con el que trabó gran amitad, Álvaro se trasladó a España, donde se introdujo en la farándula tardofranquista, pasando una temporada en Cercedilla con Luis Rosales, conociendo a Félix Grande y a Paco de Lucia, y colaborando en la revista El Indiscreto con Jimmy Giménez Arnau, que se había criado en Uruguay, donde Álvaro lo había conocido años atras.
Al año siguiente (1974), se le unieron en Madrid su esposa Susana Brian (con la que se había casado en 1969) y sus tres hijos (Rodrigo, Hernán y Alfonsina). En España, Álvaro escribió artículos para Cuadernos Hispanoamericanos, donde también colaboraban por entonces Mario Vargas Llosa, Francisco Umbral o Pere Gimferrer. Fichado por la editorial Plaza & Janés de Barcelona, Álvaro publico su primera novela, Todo tiempo pasado, con prólogo de Onetti, en 1975.
Tras el fin del Franquismo (en cuyas postrimerías Álvaro tuvo algunos problemas judiciales por varios de sus artículos), gracias a su amistad con el guionista uruguayo Antonio Larreta y con el actor Sancho Gracia, que había pasado muchos años en Uruguay y había debutado en los escenarios de la mano de Margarita Xirgu en la Escuela Municipal de Arte Dramático de Montevideo, Álvaro escribió varios guiones de Curro Jiménez, la popular serie de Televisión Española sobre las andanzas de un famoso bandolero, encarnado por Sancho Gracia, y sus compañeros El Algarrobo (Álvaro de Luna) y el Estudiante (Pepe Sancho).
Publicados otros dos libros con Plaza & Janés (El calor de enero, 1978, y Nunca hasta París, 1980), desde principios de los años 80, Álvaro colaboró en otras publicaciones, como la revista literaria Nuevo Índice, escribiendo tambien, con seudónimo (Trevor Sanders), novelitas de consumo rápido para la Editorial Bruguera, y haciendo multitud de traducciones (del inglés y del francés), además de participar en diversas obras editoriales como Crónica del siglo XX de Plaza & Janés, y diferentes coleccionables de kiosko.
Sin dejar nunca de escribir, y de reescribir, Álvaro falleció repentinamente en Madrid, fulminado por un infarto, en las primeras horas del 31 de octubre de 2015, cuando, como acostumbraba, trabaja en plena madrugada frente a su ordenador (o computadora), que quedó encendido con el fichero abierto de su última novela, Nadie lloró al comisario.